Se cae una hoja de la pared y rebotan contra el suelo trescientos sesenta y cinco días. Tras el golpe, el primer minuto del nuevo año.
Abajo queda esparcido todo lo visto y vivido durante estos meses, por si deseas recoger algún día en especial y guardarlo en el joyero. Lo demás se lo llevará el soplido del viento en cuanto te descuides, ya sea por desgracia o por fortuna. Arriba aparece un nuevo calendario, reluciente, sin ninguna marca roja de urgencia o negra de olvido.
Aunque me acuses de oportunismo, creo que mañana es un buen día para hacer un punto y aparte e inventar un nuevo comienzo, o al menos una buena continuación.
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7 comentarios:
En el alto en el camino entre viaje y viaje, un alto que me sirve incluso como meta volante entre dos años, te leo, y vuelvo a insistir, que me gusta mucho cómo escribes, este post me ha parecido tan breve como lindo. Y si, mañana es un buen día....besos de este año y para el siguiente.
Te creía perdido entre maletas, al menos hasta que se fuera la Navidad . Gracias por aprovechar ese alto en el camino y acordarte de este rincón.
Yo también te mando dos besos, el último de este año y el primero del siguiente. Y una sonrisa, que nunca sobra :)
This year it´s looking at you, kid!
"Creo que éste es el comienzo" de un gran año y que el calendario se llene de marcas.
A llenarlo de marcas de agradables colores y nada de rojos o negros.
FELIZ PRIMER DÍA DEL AÑO, ay no, ya es el segundo
Feliz Segundo Día del Año!! Creo que les pediré a los Reyes unos plastidecores para dejar el calendario colorido y optimista, porque "nene, tú y yo valemos mucho" ;)(qué tía la Maura)
En una semanita estoy allí.
Un abrazo.
PS: mi cumple es el 17. Uff,cada vez más viejuna, cómo dirías tú...
Que daño está haciendo la hora chanante.
Me apunto la fecha en el calendario como primera marca especial. ¿De qué color lo pinto? Uhm...
Verde :)
El verde está bien... sí, de acuerdo, verde ;)
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